Elon Musk realizando el saludo nazi.

Victoria de Donald Trump recrudece aspiraciones imperialistas en Estados Unidos

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| Publicado el 23 febrero 2025

El gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha comenzado una retórica imperialista sobre la región que levanta sospechas sobre las intenciones. Los intereses de Trump sobre Groenlandia, Canadá, el Canal de Panamá y el Golfo de México evocan la época expansionista norteamericana y la Doctrina Monroe que llevó a la nación norteamericana a convertirse en el imperio internacional que es hoy en día. 

Las expresiones del presidente Trump lanzadas al aire como si fueran comentarios sin trascendencia, han levantado preocupación e ira entre los residentes y gobernantes de dichos territorios. Las expresiones, que vienen acompañadas de políticas racistas y xenofóbicas como la intensificación de la persecución a los inmigrantes o la reducción de fondos de asistencia social que principalmente ayudan a las poblaciones más discriminadas, forman parte del programa de ultraderecha de un sector de la burguesía norteamericana.

No podemos dejar de mencionar los paralelos entre estas expresiones y el concepto de la Alemania nazi del “Lebensraum”. El objetivo político de la Alemania de principios del siglo 20 fue expandir su territorio a la vez que fomentó el genocidio de múltiples pueblos europeos. En ese sentido, el debate sobre el gesto evidentemente nazi de Elon Musk cobra una relevancia mayor. Nos encontramos en la antesala de discursos incendiaros para justificar posibles invasiones o intervenciones militares norteamericanas en suelos del continente americano. 

Mientras Rusia mantiene una guerra en territorio Ucraniano y el pueblo palestino enfrenta el genocidio de parte del estado de Israel, la consigna marxista de “ni guerra entre pueblos, ni paz entre clases” cobrará mayor relevancia en los próximos años.

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