¡La lucha sigue!

| Publicado el 19 julio 2017

Boletín julio 2017
Unión de Juventudes Socialistas UJS-MST

 

¿Logros de la huelga?

El Movimiento Estudiantil (ME) en Río Piedras estuvo 70 días en huelga como oposición a las medidas de austeridad que el gobierno y la Junta de Control Fiscal (JCF) insiste en imponer. Durante esos días se logró la unidad de diversos sectores que demostraron su indignación y repudio a la administración universitaria, al gobierno de turno y a los partidos de los ricos. El ME, junto al movimiento sindical, convocaron a una jornada de lucha para culminar en un Paro Nacional el 1ro de mayo de 2017. Durante varios días estudiantes y trabajadorxs del servicio público realizaron acciones directas, paralizaciones y movilizaciones contra las medidas de austeridad y precarización que aprobaría la legislatura penepé.

1ro de mayo para la historia

El 1 de mayo el país respondió con la movilización masiva más concurrida en la historia del Día de lxs Trabajadorxs en Puerto Rico. Ese día, por primera vez en años, decenas de miles de personas vivieron una intensa jornada que logró movilizar a diversos sectores del espectro político y en la que se combinaron todos los métodos de lucha. Indiscutiblemente, el estudiantado fue el primer actor político en dar la cara contra una Junta Imperial que busca desmantelar nuestro país. Durante 70 días se convirtió en el espinazo de la lucha contra el proyecto neoliberal y el saqueo de lo público.
Con esta lucha, el ME logró insertarse en el debate público desenmascarando ante el país el sistema corrupto en el que estamos viviendo; al señalar a personas vinculadas a los bancos, los bonistas y a las principales instituciones responsables de emitir gran parte de la deuda pública del país. Como si esto fuera poco, en la reunión entre el liderato estudiantil nacional y la Junta de Control Fiscal, quedó en evidencia el total desconocimiento que estxs manduletes tienen de la realidad universitaria y socioeconómica del país. Definitivamente quedó demostrado que la Junta viene a garantizar los intereses de un puñado de ricos y poderosos a costa de los derechos y servicios del pueblo; de la clase pobre y trabajadora.

Negociación y acuerdos

Durante la huelga la fuerza del ME, dio paso a las negociaciones con la Junta de Gobierno, que llevó a una lista de acuerdos que, de alguna manera u otra, atendían algunos reclamos que el estudiantado había establecido en cinco asambleas. A pesar de la Comunidad Universitaria avalar los acuerdos, la Junta de Gobierno todavía no los ha firmado, dejando muy claro su intransigencia con respecto a la lucha por la Universidad pública; y que su propósito nunca fue responder a las peticiones y exigencias de la Comunidad, sino velar por sus espaldas y las de aquellxs en el poder. Como parte del proceso huelgario, se desarrollaron y radicaron cinco Proyectos de Ley que buscan allegar más de $800 millones a la Universidad de Puerto Rico (UPR) para evitar el recorte millonario que proponen los de arriba. Se demostró la urgencia de una Reforma Universitaria donde quienes gobiernen sean quien es conocen y viven la Universidad, la Comunidad Universitaria, y a su vez evitar que personas como Nivia Fernández presidan.

A seguir dando candela 

La lucha estudiantil no acabó con el fin del proceso huelgario que comenzó el 28 de marzo. A un mes de empezar las clases, se mantiene la indignación, organización y lucha estudiantil a favor de la educación accesible y de calidad. Desde que finalizó la huelga, en el recinto se realizan actividad es de información, denuncia y movilización. El 8 de junio se hizo una conferencia de prensa y un piquete para denunciar las medidas represivas de la administración. Seguida de una marcha interna el 14 de junio, en la que se exigió que se firmaran los acuerdos, y se conectó con el estudiantado una vez más. El Comedor Universitario se ha mantenido a pesar de los esfuerzos de la administración de impedir la autogestión que problematiza y visibiliza el hambre que viven lxs estudiantes y las personas pobres en el país. Se han hecho reuniones multisectoriales para continuar trabajando los temas que aquejan a la UPR, así como actividades de confraternización y de lucha a favor de los acuerdos; como la pintata el 5 de julio y el piquete el 6 de julio. El ME está activo y puesto para enfrentar el proyecto de destrucción y privatización de la UPR que pretende imponer la JCF y el gobierno de turno.

Destrucción y privatización de la UPR      

El detrimento de las instituciones públicas es uno de los pasos para justificar la privatización de los servicios esenciales. Cuando ponemos en perspectiva todas las medidas que está tomando el gobierno y la JCF, podemos visualizar el esquema de destrucción y privatización planificado para la UPR. El recorte de $450 millones a la Universidad significa el recorte de más del 50% de su presupuesto. Este recorte comenzará implementándose este año fiscal 2017-2018 con $201 millones a la fórmula de la UPR. Tanto el gobierno como la JCF han tratado de argumentar que este recorte será subsanado si se hacen contratos con las agencias gubernamentales y el aumento en la matrícula. Sabemos que la capacidad de pago de estas agencias no es seguro, que en el pasado no han cumplido y que las agencias privadas que tienen estos contratos no los van a ceder.

¡No al Aumento!

La amenaza vigente para la UPR es de un aumento en la matrícula de $3,190, para un total anual de $5,820 para lxs estudiantes que quieren estudiar en la UPR. Dejando así la entrada a la institución cada vez más inaccesible y elitista. Más del 55% del estudiantado que ingresa a la UPR tiene un ingreso familiar de $30,000 o menos y el 60% recibe Beca Pell. Un aumento de tal magnitud implicaría una merma en la matrícula de los distintos recintos. Este capricho no será suficiente para aliviar la destrucción que significarán los recortes en la Universidad, ni va a ser uno que vería o disfrutaría la comunidad universitaria. Además, implicaría que menos estudiantes tengan acceso a la UPR, y por lo tanto menos accesibilidad, menos estudiantes, menos educación, menos profesionales, e irónicamente, menos ganancias. Mientras aquellos hacen todos los esfuerzos posibles por destruir y privatizar nuestra universidad pública, nosotrxs lxs estudiantes continuaremos la lucha por hacerla realmente pública.

En la UJS-MST entendemos que nosotrxs, lxs estudiantes a quienes les están arrebatando el derecho de estudiar; de tener un trabajo digno y quienes están sobreviviendo en esta sociedad machista y capitalista, somos quienes tenemos que organizarnos y hacerle frente a las medidas neoliberales e injustas. Organizándonos y debatiendo las diferencias en análisis sobre la coyuntura que nos aqueja, lograremos tener las herramientas necesarias para establecer un plan de lucha en pos de una UPR nuestra, accesible, feminista y de calidad.