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BREL1| Publicado el 17 enero 2013
Esto se jodió. Ganó el PPD casi sin ganas gracias a la pauta que le hicieron los melones. En serio, el país está en crisis económica sin posibilidades de recuperarse dentro del capitalismo colonial y tenemos un gobernador electo que promete 50 mil empleos en 18 meses, aunque ni él se lo cree. Los melones están de fiesta, algunos como Tato Rivera Santana tienen ya garantizado trabajo durante los próximos cuatro años pero el pueblo trabajador no tiene nada que celebrar. La economía se va a poner peor y la entrega del independentismo no ayuda.
Si los 8 años de PPD bajo Sila María Calderón y Aníbal Acevedo Vilá no fueron muestra suficiente, espere lo que viene durante estos próximos cuatro años. Aguántese, multiplique lo peor de aquellos años por dos y obtendrá lo que viene. El riesgo de que el PPD pierda las elecciones del 2016 es demasiado grande como para que los melones nos permitan hacer huelgas, protestas o marchas. “Eso es cosa del pasado” dirán. Sin embargo, las razones para luchar contra el próximo gobierno son las mismas de siempre: falta de empleo, alto costo de la vida, deterioro de la salud pública, privatización de la educación, alto nivel de criminalidad.
Alejandro García Padilla no se merece ni un segundo de “break”, pues su gobierno mantendrá continuidad con las políticas neoliberales del gobierno de Fortuño. Incluso, ya se vislumbran posibilidades de un empeoramiento en la implantación de tales políticas: aumentos en el IVU, eliminación del impuesto temporero de 4% a las corporaciones, fusión de los sistemas de retiro, cero aumentos salariales para los empleados públicos, aumento de las contribuciones a los asalariados etc. ¿Puede la clase obrera darse el lujo de permitir más ataques a nuestros ya diezmados bolsillos?
Del movimiento obrero tampoco espere mucho, si fueron las uniones chupacuotas afiliadas a la SEIU las que financiaron la campaña de Alejandro García Padilla y Cármen Yulin. Ahora Roberto Pagán le hace las vacaciones a Lole.
Lo que planifica el gobierno de Alejandro es garrote y látigo para el pueblo, mientras que los ricos seguirán viviendo del mantengo y las dádivas del gobierno. La crisis que se vive en nuestra isla es definitivamente consecuencia de nuestra condición colonial y las soluciones a tales problemas están en la independencia y el socialismo. Sólo por medio de la independencia puede nuestro país crear una industria agrícola que garantice nuestra soberanía alimentaria. Pero es bajo el socialismo que las riquezas que se obtengan de cualquier industria nativa podrán convertirse en fuente de riquezas para las grandes mayorías que residen en la isla. No se trata de legislar para crear empleos, se trata de conseguir el poder político y económico que nos permita convertir esos empleos en fuente de riqueza para el desarrollo de toda nuestra sociedad.
En fin, que nuestra consigna se cumplió: ganaron los ricos pero la lucha hay que seguirla. Esa lucha, por cierto, no le pertence al independentismo vacilante y colonizado, le pertenece a la gente trabajadora. En fin, como dice el viejo refrán: “A cada García Padilla le llega su Cuca.”