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BREL1| Publicado el 6 julio 2017
El principal zoológico de Puerto Rico, ubicado en Mayagüez, se encuentra sumergido en un escándalo por severas acusaciones que implican negligencia y muertes de animales sanos. La semana pasada salió a relucir el asesinato de uno de los tigres residentes del Zoo. Este es el caso más reciente de una larga lista de abandono, abuso y asesinatos en el Zoológico de Puerto Rico. La administración ha intentado despachar el asunto negando los hechos con información cuestionable. Sin embargo, no han podido evadir el cuestionamiento público sobre el funcionamiento del Zoológico y el maltrato a los animales.
A medida que ha aumentado la concienciación sobre el cautiverio, el maltrato, el extraer de su hábitat a animales salvajes y la lucha por los derechos de los animales en general, se han dado cambios en el ámbito de circos y zoológicos. Ante la presión social, muchos circos alrededor del mundo se han visto obligados a eliminar sus espectáculos con animales. De igual forma, se han ido cerrando zoológicos para ir reubicando a los animales que albergaban en santuarios para ser rehabilitados y algunos de ellos devueltos a su hábitat. Como bien señala People for the Ethical Treatment of Animals (PETA), los zoológicos impiden que los animales puedan satisfacer sus necesidades básicas, ya que al estar en cautiverio se privan de sus comportamientos naturales, lo cual les produce conductas que reflejan su frustración física y mental. Tener a los animales en cautiverio es el equivalente a condenar a una persona a cadena perpetua. Sin embargo, todavía estos centros de atracción y de generar dinero, se pueden encontrar en la mayoría de los países.
El Zoológico de Puerto Rico Dr. Juan A. Rivero fue fundado en 1954. Al Puerto Rico ser colonia de los Estados Unidos, su zoológico es inspeccionado por el Departamento de Agricultura de dicha nación (USDA por sus siglas en inglés). En estos informes constantemente se han señalado violaciones en torno al bienestar animal. La administración del Zoológico, aún se encuentra bajo el Departamento de Recreación y Deportes, lo que debería levantar varias interrogantes, comenzando por la visión y preparación que manejan sobre el trato y atención a las necesidades de los animales. Actualmente Alex Vázquez ocupa el cargo de superintendente del Zoológico desde hace tan solo un mes. Sin embargo, las prácticas de negligencia y abuso continúan. Según reportaje en Primera Hora, durante el año 2014 asesinaron a un puma, un babuino y un coatimundi, esto a pesar de que los tres aparentemente se encontraban en condiciones saludables.
Debemos resaltar como se ha utilizado el concepto “eutanasia” para referirse a los asesinatos de animales que han ocurrido en el zoológico. ¿Se puede equiparar la práctica de la eutanasia con matar fría y cruelmente a un animal sin justificación médica alguna? La eutanasia es un procedimiento reservado exclusivamente para la especie humana, pues se refiere a cuando la persona voluntariamente decide que desea ser ayudada a morir. Los animales inocentes que han sido asesinados en esta cárcel jamás tuvieron oportunidad de elegir.
A inicios de este año se mostraron “irregularidades” en cuanto a la muerte de varios cachorros de león. En esta ocasión han matado al tigre llamado Ángel esta semana luego de que se le hicieran recomendaciones a la administración para realizarle pruebas de salud y mejorar sus condiciones de vida y ésta hacerse de la vista larga. Esta desgarradora noticia ha creado furor entre las defensoras de los animales y la indignación ha llegado hasta el público general. Ante la ira de las puertorriqueñas y los puertorriqueños, la administración y la veterinaria del Zoológico han intentado despachar los señalamientos como meras alegaciones falsas. Sin embargo, al revisar los reportes de inspección del USDA en la fecha del 7 de febrero de este año se menciona a un tigre delgado que requiere atención médica y al cual no se le ha hecho un solo estudio desde el 2015. Otro elementos a destacar son: que contrario a lo que sostiene la administración, en efecto sí ofrecieron medicamentos expirados a los animales, y que encontraron animales cuya comida estaba vieja y su agua sucia.
Además, una investigación realizada en el programa televisivo Jay y sus Rayos X transmitida el 31 de enero, reveló la muerte de otros animales, y hasta la de un empleado. Según la confidente, las tres jirafas que había en el zoológico también murieron, y esta señala que una de ellas murió luego de que le realizaran una transfusión con “sangre de camello”. Esta ex empleada del zoológico también informó que en una ocasión unos jaguares escaparon en la noche, y uno de ellos fue asesinado de un balazo. Así también mataron a una serpiente que logró escapar, pero a esta la descuartizaron con un machete. Además, entre muchas de las negligencias que se señalan, la falta de exterminación también acabó con la vida de un empleado. Este comió un guineo que tenía orín de ratón, y ella explica que la comida de los animales del zoológico está llena de ratones y cucarachas.
Nuevamente, tras la presión social, el gobierno creó un comité ejecutivo, que según el secretario de la gobernación, William Villafañe “atenderá los problemas que enfrenta el Zoológico de Mayagüez y que servirá de apoyo para mejorar la infraestructura”. Parece mentira que, personas que se autoproclaman “defensoras de los animales” participen de esta burla. Los animales que han muerto y los que languidecen en las celdas del Zoo, no necesitan que se embellezca el mismo y se maquille el sufrimiento. Lo que necesitan es que se les permita vivir en condiciones radicalmente diferentes, esto es en su propio hábitat. En Liberación Animal PR entendemos que el tiempo de paños tibios se acabó. ¿Cuántos animales más tendrán que morir para que el gobierno entienda que hay que cerrar este Zoológico? ¡No más cautiverio, no más esclavitud y muerte! ¡A cerrar este y todos los zoológicos!
Estamos convocando una manifestación el sábado 5 de agosto a la 1pm frente al Zoológico de Mayagüez. Para exigir el cierre de las facilidades y la reubicación de los animales en santuarios donde puedan vivir lo más cercano posible a su hábitat