Durante la mañana del pasado lunes 11 de octubre de 2021, la Federación de Maestros de Puerto Rico (FMPR) celebró una Asamblea informativa donde se discutió lo siguiente.
El 27 de septiembre de 2021, el magisterio puertorriqueño celebraba el triunfo del NO al acuerdo de la AMPR con la Junta de Control Fiscal (JCF), que recortaría las pensiones de los maestros y maestras activas. La respuesta del magisterio fue la siguiente: 11,277 (65%) de los educadores repudiaron ese acuerdo y 6,059 (35%) lo favorecieron. Ese mismo día, el presidente de la Cámara de Representantes, el deshonorable Rafael “Tatito” Hernández, radicó el Proyecto de la Cámara 1003, junto a representantes de su delegación, que permite la emisión de bonos que necesita la JCF para viabilizar su Plan de Ajuste de la Deuda (PAD).
De forma demagógica señalan públicamente sus alegadas políticas de cero recortes, pero excluyen que para que haya cero recortes debe haber cero congelaciones de pensiones, que es lo que pretendían hacer mediante el original Capítulo 4 de dicha pieza legislativa. Dicho capítulo fue eliminado, pero no se redactó lenguaje alguno que salvara las pensiones de aquellos que están por beneficios definidos, como es el caso de los maestros, maestras y empleados del Sistema de Retiro para Maestros. Adicional y más importante, esta pieza legislativa era totalmente innecesaria, pues la Ley 7 de 2021 (Ley para un Retiro Digno) ya establecía dentro de su política cero recortes a pensiones actuales y futuras, y mantienía las pensiones por beneficios definidos tal y como están. Este proyecto sirve para un solo propósito, y es entregarse a los caprichos de la JCF. De esta forma permiten la emisión de bonos para el pago de una deuda ilegal, sin auditar, que nos llevará según los peritos en economía a una segunda quiebra en los próximos años venideros, y que entrega nuestra ficha del tranque a la JCF, viabilizando la ley habilitadora necesaria para imponer la miseria y la indigencia al pueblo trabajador.
Con ellos, los legisladores que votaron a favor del proyecto demuestran lo que ya es conocido por todos: su prioridad no es y nunca ha sido defender al pueblo de quienes nos quieren dejar sin país, y promueven la pobreza extrema en Puerto Rico.
El Capítulo de Jubilados de la FMPR, su Comité Ejecutivo, el Frente Ciudadano por la Auditoría de la Deuda, el Frente en Defensa de las Pensiones, el Frente Amplio en Defensa de la Educación Pública y dirigentes del movimiento obrero han estado en la Legislatura desde tempranas horas de la mañana hasta altas horas dela noche por las pasadas 2 semanas cabildeando, reuniéndose con los legisladores para buscar su voto en contra de dicha medida, deponiendo en Cámara y Senado en vistas fast track en un tema que afectaría a las presentes y futuras generaciones por 25 años.
El magisterio participó activamente de la campaña en contra de la medida por llamadas telefónicas, correos electrónicos, tuitazos, protesta en el Capitolio y participación de vistas públicas, haciendo sentir su posición. Tan es así, que la representante Deborath Soto, coautora del P. de la C. 1003 y quien es maestra de profesión, revocó su firma de dicho proyecto y le votó en contra.
Muy lamentable y vergonzosamente, los legisladores del PNP y PPD no tuvieron el valor de enfrentarse a la JCF y le dieron paso a viabilizar el 7mo PAD enmendado, que destinaría al pueblo de Puerto Rico a la indigencia por 25 años. Lo mismo ocurrió en el Senado de Puerto Rico, donde entonces incluyen enmiendas al proyecto para alegadamente garantizar cero recortes a las pensiones, pero incluyen una enmienda en que son ellos los destinados a identificar los ingresos para garantizar sus pagos, para incluirlos en el presupuesto anual del país.
Por otra parte, a los maestros y maestras activos ni les mencionaron en sus enmiendas, por lo que ni aparentan salvar nuestro Sistema de Retiro por beneficios definidos, y al implementarse el Plan de Ajuste, con ello se incluye el dejarnos sin retiro por beneficios definidos, según establecido en el Anejo F2 del PAD sometido por la JCF. Mientras garantizan cantidades de pago obsceno para los bonistas, preparan el camino para las medidas de austeridad a imponer al pueblo. El pasado 6 de octubre, se aprobó esta medida con enmiendas; ahora regresó a la Cámara el 18 de octubre de 2021 para determinar si concurren o no, y realizar el proceso legislativo necesario para viabilizar el Plan de Ajuste de la JCF.
En resumen, éstas son las consecuencias catastróficas de la aprobación del P. de la C. 1003 para el pueblo trabajador: