Los acontecimientos recientes dejan al descubierto la entrega del gobierno de Aníbal Acevedo Vilá a los grandes intereses y la falsedad de su llamado a la soberanía. Con la firma de la Ley de Incentivos a los Industriales y su negativa a escuchar siquiera a los trabajadores dejó claro que representa a los ricos y que para él la soberanía reside en las corporaciones millonarias. Su soberanía con FBI, Corte Federal, Homeland Security y toda la presencia del gobierno federal hace evidente que se trata de una carnada para atrapar el voto independentista en las elecciones. Las actuaciones del gobernador le plantea una pregunta a los independentistas y líderes obreros que en el pasado lo han apoyado: ¿Vendrán junto al pueblo a resistir los embates del gobierno o mantendrán su respaldo a los enemigos de los trabajadores?
La soberanía de Aníbal es una mentira
La soberanía de AAV incluye la permanencia en Puerto Rico de todas las instituciones federales. Supone que la soberanía resida «en el pueblo» de boca, mientras los federales mantienen su predominio sobre la vida política, economía y social del país.
El más reciente ejemplo de que su llamado a la soberanía es un juego fue su respaldo a la celebración de las primarias demócratas en Puerto Rico. Junto al PNP impulsó el uso de millones de dólares para tratar de que votáramos por el presidente del país que usurpa su soberanía. El pueblo sabiamente lo derrotó por medio de una escasa participación.
Entrega el país a los grandes intereses
La firma apresurada de la Ley de Incentivos Industriales dejó claro a quien representa el gobierno de AAV. Mientras le impone nuevas contribuciones y aumentos de tarifas a los trabajadores, para los ricos aprueba privilegios y mantengo contributivo.
Esta ley reduce dramáticamente las contribuciones a las empresas capitalistas. Para las corporaciones la taza contributiva efectiva (después de las deducciones) será de un 2%. Actualmente el 80% de los gastos del gobierno lo pagan los trabajadores y el pueblo y solo el 20% lo pagan las corporaciones. Con la nueva ley esa injusticia será más grande.
El sistema de explotación que respalda el PPD y el PNP permitió que el año pasado las empresas capitalistas extranjeras se llevaran más de 34,000 millones de dólares en ganancias mientras el pueblo se come un cable.
AAV, el PPD y el PNP están vendidos a los industriales y no pueden ser respaldados por los independentistas y los trabajadores. Ambos partidos no creen en la soberanía del pueblo y defienden los intereses de los capitalistas.
O con el pueblo o con los enemigos de los trabajadores
En el pasado, parte del liderato del Movimiento Independentista Nacional Hostosiano (MINH), un grupo de líderes obreros y varios analistas independentistas, colocados estratégicamente en posiciones de influencia por las empresas radiales afines al gobierno, respaldaron a AAV y el PPD en las elecciones. Durante su administración han roto lanzas tratando de defender los desastres de su gobierno, incluso en momentos cuando cerró las agencias y traicionó la promesa de no establecer un impuesto a la venta. Estos sectores, en cierto sentido, le sirvieron de sostén ideológico y de valla de contención frente a los sectores en lucha.
La esperanza de estos independentistas y líderes obreros pareció estar cifrada en una evolución progresista y «soberanista» del gobernador. Cualquier guiñada de AAV servía para alimentar esa esperanza y mantenerlos bajo su influencia.
Hoy el gobernador les devuelve el favor dibujando una caricatura de soberanía y firmándoles en la cara la Ley de Incentivos Industriales sin siquiera escucharlos. La estrategia de colaborar con el gobierno antiobrero y colonialista de AAV ha tocado fondo. El momento de definirse ha llegado.
Las políticas contra el pueblo, la corrupción personal de AAV, su entrega a los grandes intereses, su falta de respeto a los trabajadores y el engaño de la soberanía conducirán al gobernador y el PPD a una aplastante derrota. ¿Marcharán estos compañeros a su lado en esa jornada oprobiosa? ¿Pedirán otra vez que votemos por los que nos impusieron el IVU y agua, la luz y los peajes? ¿Endosarán al que trató de destruir a los maestros en lucha y quiere privatizar la energía eléctrica? ¿Estarán del lado de los que representa los intereses de las corporaciones y los ricos? ¿Comprarán la soberanía con presencia federal que nos quiere vender?
El momento es de respuestas claras y de no colaboración con los enemigos de los trabajadores y el pueblo