Doble rechazo a pena de muerte en Puerto Rico

El Frente Socialista (FS) calificó de trascendental el veredicto de sentencia que emitió ayer el jurado que veía el caso en que se consideraba imponer la pena capital en Puerto Rico a dos jóvenes boricuas.

“La decisión de estos casos representa un doble rechazo –ya que se sentenciaban a dos personas- a los intentos de EE.UU. de imponer la pena capital en la Isla, y muestra que el pueblo de Puerto Rico valora fuertemente esa voluntad expresa que la abolió en 1929 y cuya eliminación ratificó en su Constitución en 1952. Hubo un primer caso de pena de muerte luego de su abolición, en que el jurado encontró inocente al acusado. La diferencia entre las decisiones de ahora y la que se dio entonces es que en los casos actuales, los acusados fueron encontrados culpables, y lo que se debía estimar ahora era la sentencia a aplicarse, por lo que fue un rechazo claro y contundente a esa pena”, sostuvo Jorge Farinacci García, uno de los portavoces del FS.

Asimismo, consideró los continuos intentos de aplicar la pena de muerte en Puerto Rico como una estrategia política del Gobierno federal de aprovechar la situación colonial de la Isla para imponer sus intereses por encima de la voluntad de los puertorriqueños. Señaló que el revés lo da el Tribunal de Circuito de Apelaciones de Boston como una afrenta a la decisión del juez federal Salvador Casellas de no aplicación. “Se ve claramente las intenciones de Estados Unidos de imponer la pena capital a la trágala, por la naturaleza de los casos, que no son extremos”, denunció, haciendo la salvedad de que rechaza la medida en ambas instancias.

No obstante, indicó Rafael Bernabe, también portavoz de la organización, “aún existen otros casos pendientes en los que se pretende considerar la aplicación de la pena capital, entre los que se incluyen casos de extradición. Es importante que se siga creando presión para continuar mandando un mensaje claro de repudio a esta pena, que lejos de contribuir a reducir los niveles de violencia o desprecio por el ser humano en la sociedad, lo que hace es nutrir ese ambiente que todos y todas deseamos combatir”.

Los portavoces recordaron que además de haber demostrado no ser un disuasivo para la actividad criminal, la pena de muerte es aplicada de manera selectiva. Sostuvieron que las estadísticas revelan que el número de las personas ejecutadas o condenadas a serlo provenientes de comunidades marginadas –entre ellas pobres, de la raza negra y latinos– es desproporcionalmente mayor al de que cualquier otro sector, a la vez que advirtieron que los argumentos en contra de la pena de muerte no necesariamente son una defensa a favor de la inocencia de los acusados por crímenes.

Bernabe insistió en que “los intentos del Tribunal Federal de aplicarla nuevamente es volver a un sistema arcaico, cuando precisamente la tendencia alrededor del mundo y en los mismos Estados Unidos es eliminarla. Es como querer volver a legalizar la esclavitud”.

Los portavoces también recordaron que existe un sinnúmero de personas que han sido condenadas a la pena de muerte y han estado en espera de su ejecución por muchísimos años, y que al final, se descubre que son inocentes. “Los errores, que son inevitables en todo sistema creado por la sociedad, incluso en el judicial, en este caso son irreparables. No existe compensación capaz de sustituir la vida de una persona”, apuntó Ricardo Santos Ortiz, parte de la portavocía del FS, quien trajo a colación el caso de Juan Menéndez, puertorriqueño que estuvo 17 años en “death row” hasta ser declarado inocente y pedírsele disculpas por dicho “error”. Menéndez es ahora parte de la lucha contra la pena de muerte y aboga por su abolición en cada país al que es invitado para dar su testimonio.

El Frente Socialista estuvo participando durante las pasadas semanas de las vigilias frente al Tribunal federal convocadas por la Coalición Puertorriqueña Contra la Pena de Muerte. Los portavoces urgieron al pueblo de Puerto Rico, que en su mayoría se opone a la pena capital desde diversas perspectivas, a participar de los distintos esfuerzos que se desarrollen a partir de ahora.

“Pese a que las manifestaciones que realizamos coincidieron con el juicio que concluyó ayer, nuestra lucha no se acaba ahí. Este no fue el primer caso y no será el último en que se trate de imponer dicha sentencia, a menos que continuemos haciendo una denuncia contundente sobre el asunto y se respete la voluntad de este pueblo. Por eso es urgente que toda persona que se oponga a la pena de muerte participe de esta lucha”, concluyeron.