Desobediencia civil en Peñuelas

| Publicado el 23 junio 2015

Se prende y extiende la lucha contra las cenizas de carbón de AES

Angel G. Quiles Vega
Bandera Roja

En la madrugada del lunes 22 de junio, vecinos de los barrios Tallaboa, Encarnación y Seboruco del pueblo de Peñuelas, así como seguidores del movimiento en contra del depósito de cenizas de carbón provenientes de AES en Guayama, paralizaron las labores de los vertederos EC Waste y Eco Systems en Peñuelas.

En comunicado de prensa emitido hoy, el Comité Pro Salud, Desarrollo y Ambiente de Tallaboa señaló “ Los residentes se han visto forzados a hacer desobediencia civil y bloquear el acceso hacia ambos vertederos ante el continuo depósito de cenizas, también llamadas comercialmente ‘Agremax’, en total incumplimiento con la Ordenanza Municipal Núm. 13 Serie 2012-13 del 10 de abril de 2013 que prohíben el uso de cenizas procedentes de la quema de carbón en plantas generadoras de energía como material de relleno y su depósito sobre terrenos en los límites territoriales del municipio de Peñuelas.” Vallas de concreto armado “aparecieron” en el camino a los vertederos que junto a la militancia de las y los manifestantes impidieron el paso de camiones llenos del tóxico material que fue devuelto a la Planta de Carbón AES.

“Los camiones que trasportan las cenizas radioactivas y tóxicas de carbón recorren un trayecto que cubre desde la planta generatriz de energía con Carbón AES en Guayama hacia los municipios de Salinas, Coamo, Santa Isabel, Juana Díaz, Ponce y culminando el depósito en los vertederos de Peñuelas.” Añade el comunicado. Por otro lado la ruta hacia el vertedero de Humacao cruza los pueblos de Arroyo, Patillas, Maunabo y Yabucoa. Pero allí se le puso presión y han optado por la de Salinas, Cayey, Caguas, Gurabo, Juncos y Las Piedras.

AES CRIMINAL AMBIENTAL

La AES es una planta generatriz de electricidad a base de la quema de carbón que ubica en Guayama. Es parte de la política gubernamental del PPD y el PNP de privatizar la producción de energía eléctrica. Actualmente suple el 15% del total de la electricidad que se consume en Puerto Rico. El carbón viene de Colombia hasta el muelle cercano y es transportado por una gigantesca correa (conveyor) de miles de pies de largo para ser incinerado y generar electricidad. Esta quema de carbón produce toneladas de ceniza asociada a enfermedades respiratorias y al cáncer. La AES mantiene en sus predios una enorme montaña de cenizas a merced del viento y la lluvia que las transporta a comunidades cercanas. Como la cantidad es inmensa, las llevan fuera de sus predios.

AES mintió para establecerse cuando aseguró que las llevaría de vuelta a su lugar de origen. Lo cierto es que las llevaron a Samaná en República Dominicana bajo el engaño de que era material para construcción. Más de cien millones de libras de cenizas de carbón fueron descargadas en su costa. Allí la población denunció deformidades en recién nacidos y otras enfermedades como erupciones en la piel y problemas respiratorios. AES fue demandada por el gobierno dominicano y transó, sin hacerse responsable, por solo seis millones de dólares; se le prohibió volver a descargar dicho material. Pero nada de ese dinero llegó a las humildes familias afectadas.

Actualmente AES riega sus cenizas por todo Puerto Rico con total impunidad de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) y de la Junta de Calidad Ambiental. No solo las han depositado en los vertederos de Peñuelas y Humacao, sino que las han utilizado como relleno en carreteras y en la construcción de centros comerciales como en Arroyo y se asegura que también en viviendas de Gurabo.

LA LUCHA SIGUE Y SE EXTIENDE

Vecinos del sureste, convocados por el Movimiento Socialista de Trabajadores se organizaron hace dos meses en un frente contra la generación, transportación y depósito de cenizas que ha renovado con ímpetu la lucha que se inició en los años 90 para detener la nefasta AES que comenzó a operar en el 2002. Así la Alianza Comunitaria Ambiental del Sureste (ACASE) ha desarrollado varias manifestaciones, charlas en comunidades y distribución de miles de boletines contra las cenizas y demandando el cierre de la AES. Sabemos que falta desarrollar más acciones como la de Peñuelas para proteger nuestra salud y nuestro ambiente. Por eso exhortamos a desarrollar esta lucha. De forma militante y contundente.