La quiebra de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) podría implicar un aumento adicional en la factura de luz de miles de familias, de aprobarse el Plan de Ajuste de la Deuda propuesto. La jueza Taylor Swayne, que ve los casos de la quiebra del gobierno de Puerto Rico, deliberará sobre la aprobación o rechazo del más reciente plan que busca otorgar condiciones favorables a especuladores que compraron los bonos a precios de “pescao abomba’o” como dice el refrán popular.
La Autoridad de Energía Eléctrica, una entidad pionera que garantizó acceso casi universal a la electricidad en el país durante décadas, tomó dinero prestado en forma de bonos para mantener y desarrollar la infraestructura. Estos bonos iban dirigidos a mejoras permanentes que a su vez incrementaban el valor de la empresa gubernamental. Sin embargo, la entidad fue sometida también a décadas de malos manejos administrativos y económicos con el objetivo de fomentar su deterioro para garantizar la privatización. Hoy la entidad se encuentra en una crisis ante los embates del clima luego de años sin mantenimiento adecuado.
Detrás del plan de ajuste de la deuda de la AEE lo que se esconde es una nueva etapa en la acumulación de riquezas por medio del empobrecimiento sin límites de la gente trabajadora. El hecho de que el plan de ajuste vuelva inoperante a la AEE y al país es irrelevante para los magnates especuladores que sólo buscan el crecimiento de sus porfolios.
Lo que queda por hacer es que la clase trabajadora rescate la AEE para el pueblo. Es primordial en esa lucha exigir el regreso de los trabajadores unionados desplazados quienes fueron víctimas de una conspiración capitalista y colonial que demonizó al sindicato para facilitar el asalto que nos quieren hacer por medio de la factura de luz. ■