El lunes 1de mayo miles de personas se dieron cita a las convocatorias realizadas por sindicatos, organizaciones sociales y políticas para conmemorar el Día Internacional de lxs trabajdorxs. Por lo menos, tres convocatorias partieron de distintos puntos del área metropolitana. Un grupo de sindicatos del servicio público y el sector privado convocaron a salir desde la Universidad de Puerto Rico en Río Piedras. Otro grupo de sindicatos junto organizaciones sociales y políticas convocaron a salir desde el Departamento del Trabajo. Ambas manifestaciones se encontraron en la Avenida Muñoz Rivera frente a las oficinas de la Junta de Control Fiscal. Una tercera convocatoria partió del edificio gubernamental en Minillas y se movilizó a detener el tránsito en el expreso #22 a la altura del Túnel de Minillas.
Las organizaciones que se movilizaron a la Milla de Oro denunciaron la situación de precariedad económica y social en que se encuentra el país producto de las políticas de austeridad promovidas e implementadas por el gobierno de los ricos y la Junta de Control Fiscal. Además, la FMPR y los sindicatos del sector educativo, como la APPU y la HEEND, exigieron una educación con perspectiva de género y anti-racista, el fin de las escuelas charter, la restitución de los fondos a la UPR, un sistema de retiro digno para maestrxs, profesorxs y empleados de la UPR, justicia para los docentes sin plaza, entre otras.
La convocatoria de la UPR partió a eso de las 10:30 AM, luego de una marchara por el Recinto. Este grupo de sindicatos marchó por la Ave. Muñoz Rivera hasta coincidir con la convocatoria del Departamento del Trabajo. Las organizaciones allí presentes se movilizaron por la Ave. Ponce de Leon. Ambas marchas se desplazaron paralelamente hasta coincidir en la intersección de la Ave. Ponce de Leon, Ave. Muñoz Rivera y Ave. Roosevelt. Allí, la Policía de Puerto Rico arrestó a las líderes Jocelyn Velazquez y Eva Ayala y al compañero de la UTIER Josué Mitjá, frente al edificio de Liberty, por reclamar que abrieran el paso para marchar libremente por la Avenida. La policía había establecido un perímetro acordonando toda el área de la Milla de Oro, cerrando el paso desde las oficinas de Liberty en adelante y bloqueando la entrada a todos los edificios de la Muñoz Rivera. El gran despliegue policiaco demuestra una vez más que que la Policía de Puerto Rico está para velar por los intereses de los ricos, la banca y el gran capital, protegiendo sus propiedades, mientras éstos se despachan con la cuchara grande saqueando los bienes públicos, quitando derechos e imponiendo austeridad.